miércoles, 19 de mayo de 2010

LAS BASES

Un único Gobierno, Vaticano, gobernando desde las sombras de cualquier denominación, grupo, institución (de salud, por ejemplo), o uniforme, empujándonos hacia el abismo de lo retrógado del siglo XIV.

Mucho desarrollo tecnológico y avances en lo científico, pero como especie vamos hacia la robotización, hacia la más absoluta y abyecta irracionalidad de la obediencia ciega  y el silencio más cobarde, con sus pactos tácitos o concertados en donde sus bases son EL TERROR, que va más allá del miedo.

Y sí, lo del Juez Baltazar Garzón Real, a mí me da, además, verguenza ajena y miedo porque nada se hace por azar en política o ideología. Y esto tiene todo los visos de ser tan solo el principio.

La transición debió servir para cambiar, y estos señores pertenecientes a la "Vieja España" debieron haberse acogido a la jubilación anticipada, pasar a retiro voluntario o al menos alguien debió de habérselos sugerido. Pero no, ahí han seguido estando y hasta en algunos casos se los ha recolocado. Y la casa está que se cae de anquilosada, de vieja y retrógada y autoritaria.

¡Qué pena España, qué pena! Tenías dos caras: una externa y otra interna. Ahora el mundo acaba de ver la interna y -por falta de observación- no sale de su asombro. Pero es ahora cuando por fin das la cara, la verdadera. Te has quitado el velo frente a todos, liquidándote a un primogénito (ha habido otros menos notorios), y todo el mundo se está preguntando, ¿pero, qué haces?
E incluso los que te conocíamos las dos facetas también hemos quedado pillados. Esa mañía que tenemos de querer creer...
Y también nos indignamos y ofuscamos y enfadamos, porque no dejamos de vernos en ese sacrificado por los más altos intereses, esa fantasmada llamada PODER.

Y repito, nos acabas de robar la esperanza.

Muy bien, resignémonos a volver al siglo XIV.

La ventaja del Sr. Juez B. Garzón Real, es que siempre tendrá (y así sea) el apoyo y el favor. Pero que un Juez, en plena democracia de un país europeo del siglo XXI tenga que autoexiliarse? Es demasiado para la razón.


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